jueves, 25 de noviembre de 2010

HG Wells vestido de niña



Herbert George Wells tuvo una hermana a la que no conoció nunca porque falleció antes de que él naciera. Fanny (su verdadero nombre era Frances) fue la mayor de los cuatro hermanos y murió de apendicitis. En aquellos días no se conocía en que consistía esta enfermedad y se pensaba que era una inflamación de los intestinos. Fanny Wells estuvo en una fiesta infantil en casa de unos vecinos "uno o dos días antes", y su madre siempre le echó la culpa a la comida que ingirió allí. Nunca pudo perdonarles, no habló más con y sobre ellos y ni siquiera permitió que se les nombrase en su presencia.

Fanny Wells fue una niña precoz, muy despierta y avanzada para su edad pero de salud frágil. En su libro de memorias, Wells la define como "una niña de invernadero, con una piedad gazmoña que era el encanto de mi madre". Hacía la colecta todos los domingos, repetía muchos himnos de memoria, decía muy bien sus oraciones y era el ojito derecho de su progenitora.

Para Sara Wells fue un golpe muy duro la muerte de su hija. Bertie, como lo llamaban en su casa, nació dos años y pico después de la muerte de su hermana. Según Anthony West, un hijo extramarital del escritor, el nacimiento del que sería más tarde su padre, fue a causa de la muerte de su hermana. O dicho de otro modo, si Fanny no hubiera muerto, Herbie no hubiera nacido.

El matrimonio Wells se llevaba muy mal, como el perro y el gato. Al poco de la boda, las discusiones eran diarias. HG confirma que sus padres dormían en habitaciones separadas y que siempre discutían. José Wells evitaba estar en casa y siempre tenía algún motivo para salir. Según West, tras la muerte de Possie (así la llamaba su madre), Sara aceptó cohabitar con su marido. Y de este modo nació Herbert George Wells.

Wells, en su libro de memorias, nunca dijo nada sobre el tema. Lo que si dice es que él, de pequeño, estaba unido a su madre. Pero el menor de sus hijos era muy opuesto en su caracter a su difunta hermana: "Nací blasfemo y rebelde. Cuando me bautizaron decían que berreé con una vehemencia que no se había conocido en la historia de mi familia". Desde que pudo recordar, HG Wells fue un ateo. Pero esa es otra historia que relataremos en su día.

En realidad, tanto el título como la manera de exponer el tema está hecho adrede para hacer creer al lector que HG Wells iba vestido de niña cuando era muy pequeño. Entonces era común que a los bebés se les vistiera con una especie de baby, sobretodo o guardapolvo para que no mancharan la ropa común. Este era una especie de vestido o faldón y era usual que en las familias de bajo nivel económico, como la de Wells, fuera de color neutro con la intención de ahorrar gastos. Pero aparte de la bromita, todo lo demás es cierto.

Aportado por compinchados.

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