viernes, 26 de noviembre de 2010

El universo del niño Wells



Hoy la ciudad de Bromley tiene un aspecto muy distinto del que tenía en la segunda mitad del siglo XIX. Hoy la calle donde nació es peatonal, y donde estaba la Casa del Atlas hay una moderna tienda. Pero en la tienda, como un mínimo homenaje, hay una placa que recuerda el lugar.



"Lugar del nacimiento de HG Wells, nacido el 21 de septiembre de 1866".

El pequeño Bertie solía jugar en el diminuto patio. A veces corría escaleras arriba y abajo gritando desaforadamente, pero seguramente su madre le mandaba a jugar al patio, imaginamos para evitar que se cayera por las escaleras. En su libro de memorias, Wells recuerda dos veces su capacidad pulmonar; durante su bautizo, y al narrar su infancia. El mundo del pequeño estaba principalmente en el patio, la cocina y el lavadero. Esta planta subterránea de la casa estaba llena de cacharros: jarros, cazuelas, potes de conserva. En el patio había un arriate donde el padre cultivaba flores, y una parra arrimada al muro que daba al patio del carnicero. Cuando el futuro escritor tenía diez años, su padre se cayó de la parra y se rompió la cadera. Bertie, en los primeros años de su vida, jugaba con cualquier cosa que encontraba: cáscaras de huevo, hojalatas, cajas y otros objetos de interés. En su libro de memorias no nombra ningún juguete, o por carecer de ellos, o por no recordarlos. Bien pudiera ser lo primero, porque la familia pasaba por dificultades económicas; bien pudiera ser lo segundo, ya que escribió el libro a la edad de sesenta años. Tampoco nombra que jugara con sus hermanos, aunque es posible que fuera por la diferencia de edad. Con Fred se llevaba cuatro años (nació en 1862), pero con Frank se llevaba nueve (1857). Pero cuando habla de su período escolar, si insinúa que sus dos hermanos mayores habían abandonado la escuela. En su libro de memorias apenas nombra a sus dos hermanos durante esta etapa de su vida. Por otra parte, Herbert George fue una persona muy inteligente, y sus dos hermanos, aunque no fueran tontos, si fueron dos inadaptados sociales que apenas supieron desenvolverse en la vida. O al menos no supieron afrontar las dificultades que la vida les presentó. Al leer su Experimento en autobiografía, en ocasiones parece que el pequeño Bertie fuera hijo único. Sin que podamos afirmarlo rotundamente, pero parece que el niño jugaba solo en la planta subterránea de la casa, mientras los dos hermanos mayores andarían (y es una suposición) por la calle.


Aportado por compinchados.

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